Hace algunas semanas, mi compañera Natalia subió una entrada sobre la importante relación entre sueño y productividad. Hoy quiero hablaros de la siesta, eso tan español y que poco a poco va extendiéndose al resto del mundo, ya no solo en casa, sino también en el trabajo.
Ya dijimos que dormir es algo fundamental para llevar una vida sana y saludable, además de, en relación al trabajo, ser más eficaces y productivos. Tendemos a pensar que el mejor momento para recuperar fuerzas y descansar es por la noche, cuando en teoría dormimos más horas; sin embargo, la siesta también ayuda, y mucho más de lo que creemos. Una buena siesta, que consigue que recuperemos energías y estemos más descansados, es la que se realiza a mediodía y tiene que durar entre 10 y 30 minutos. Hay varios estudios (si estás interesado en profundizar en el tema, haz click en los siguientes enlaces: Australia y Columbia) que concluyen que la siesta incrementa la capacidad de alerta del individuo, reduce la sensación de fatiga, y mejora el rendimiento y la sensación de estar despierto.
La explicación científica a esto es que el sueño es un proceso que consta de cuatro etapas:
- Adormecimiento, dura diez minutos. Es la transición entre estar despierto y dormido.
- Sueño ligero, disminuye tanto el ritmo cardíaco como el respiratorio. El cerebro desconecta de los estímulos externos.
- Sueño profundo, dura 20 minutos. Es la fase en la que el cerebro verdaderamente descansa, y suele ser muy difícil despertarse de ella.
- Fase REM, donde ocurren los sueños. El cerebro está muy activo.
Así pues, si nos echamos una siesta muy corta, de menos de 10 minutos, no logramos pasar de la primera fase y es como si no nos hubiésemos dormido nada. Es cuando entramos en la segunda etapa donde el cerebro consigue eliminar los elementos externos que no considera importantes, y así consigue descansar. De ahí que esos 10 a 30 minutos de siesta sean los realmente importantes, en los que conseguiremos aumentar la energía y productividad para dar lo mejor de nosotros el resto de la jornada.
Pero, evidentemente, no podemos permitirnos perder tiempo en desplazarnos a nuestra casa todos los días, en medio de la jornada laboral, para echar una cabezadita. Por ello, algunas empresas norteamericanas han puesto en marcha políticas de promoción de la siesta o power nap. Un ejemplo de ello es el bufete de abogados internacional White & Chase, que en una de sus últimas reformas en su oficina de Washington DC agregaron a su particular "habitación del bienestar" las cápsulas de sueños.
Francisco Vásquez, socio de dicho bufete, asegura que han sido bien recibidas por los 300 empleados con los que cuenta la firma en esta sucursal, y que se usan entre 5 y 8 veces al día. "Se trata de darle a la gente lo que quiere. Y los empleados contentos son mejores empleados, así que estamos felices de hacerlos felices", dice Vásquez. Cada cápsula del sueño cuesta en torno a los 13.000 dólares, y llevan apareciendo en Silicon Valley desde hace ya una década.
Esta inversión está presente en cada vez más tipos de negocios, como en sectores de tecnología, aviación y medicina, los cuales desde hace un tiempo han implantado normas e iniciativas relacionadas con el descanso, enfocándose en el sueño como parte de sus programas de bienestar y sus esfuerzos por mejorar la productividad de sus empleados.
Fuente:
Fernandez, A. (24 de 10 de 2017). Effectivo.
Recuperado el 15 de 04 de 2018, de
https://www.effectivo.es/siesta-productividad/
Morini, T. F. (09 de 01 de 2014). El País. Recuperado
el 15 de 04 de 2018, de
https://elpais.com/sociedad/2014/01/08/actualidad/1389193698_350167.html
Munshi, N. (02 de 10 de 2017). El Cronista.
Recuperado el 15 de 04 de 2018, de
https://www.cronista.com/financialtimes/Dormir-en-el-trabajo-puede-mejorar-el-rendimiento-laboral-20171002-0017.html
¡Me ha parecido una entrada súper interesante y un tanto graciosa, la verdad!
ResponderEliminarNo tenía ni idea de esta idea que, en mi opinión, hace un gran llamamiento a la innovación.
En mi opinión, no estaría nada mal que esto se implantase en las empresas españolas, ya que España es el país de la UE en el que más se trabaja y en el que las jornadas laborales son más largas.
Hacer parones en la jornada y tener la oportunidad de echar una cabezada seguro que ayudaría a los trabajadores a ser más productivos, tener mejor humor y crear un buen ambiente laboral, así como tener una buena gestión de la calidad laboral.
Un saludo!
¡Gracias, me alegro de que te haya gustado!
ResponderEliminarDesde luego es un método innovador y que creo que con el paso de los años se irá poco a poco introduciendo en el mercado laboral, sobre todo aquí en España. También hay que tener en cuenta que, por ejemplo, el comprar estas capsulas del sueño conlleva un coste muy alto que con los tiempos que corren no todas las empresas pueden permitirse, pero según mejore la situación estoy segura de que la siesta en el trabajo será lo más normal del mundo.
¡Un saludo!